28 July 2005

# 9

¿Que es ser periodista?. Es algo que siempre me pregunto. Y voy más al fondo de la cuestión, más al hueso con un corte filoso de mi navaja auto-cuestionadora: ¿qué significa la libertad de expresión?.
¿Puede alguien que se sienta sobre un teclado o enchufado o mecánico escribir cualquier cosa de cualquiera?. ¿Es más libre aquel que paga un espacio en radio para decir bobadas que aquél que se va formando sin cobrar, pero sin pagar... con lo cual estaría haciendo un curso curricular... sin cargo para su bolsillo o el de sus padres?.

Además, si las visiones humanas se cuentan por cada ser humano que pisa este mundo ¿quién puede erigirse como salvador de la felicidad y el bienestar y exigirme a mi a escucharlo, a leerlo, a aprobarlo?.

Si, son preguntas. Y casi ninguna respuesta. Bueno, después de todo: “en la curiosidad está la base de la sabiduría y el conocimiento”. Pero mi curiosidad es para paliar el hambre interna propia de cada sed de cada ser (sed-ser, ser-sed) y que solo pretende dejarme bien a mi, tranquilo, satisfecho, “pipón”... si se me permite el vetusto término. No pretendo crear un postulado que otros quieran o (mucho peor) deban seguir a pie juntillas. No señor. Solo me pregunto para responderme. Y satisfacerme.
Pero repito: hay cada personaje pululando los medios. Y nunca tan bien empleado el concepto y ya no por mediático: por mediocres. Demasiadas radios, con demasiados novatos pagados de si mismo.
Demasiadas publicaciones, con demasiados cultores de la no-cultura.
Demasiado de todo. Por que hace tiempo (no mucho) había que buscar para descubrir. Ahora, hay que cubrir, para cuidarnos de una desmedida expresión que de libertad solo tiene una avenida. Y cuidado con morderse la lengua: solo tu propio veneno será la tapa.

Malcolm K. Laswell (1957 / 2001)